El reto: crear recordatorios personalizados con IA
Thalla, una aplicación basada en WhatsApp, se propuso resolver un problema común: ayudar a los usuarios a cumplir las tareas y rutinas diarias. A diferencia de las aplicaciones tradicionales de recordatorios, Thalla necesitaba predecir los hábitos de los usuarios, aprender de su comportamiento y darles empujoncitos en el momento perfecto. Sin embargo, su pequeño equipo se enfrentó a varios obstáculos:
- Falta de conocimientos de codificación para desarrollar un sistema de IA complejo.
- Dificultad para iterar rápidamente sobre nuevas ideas para la prueba de usuarios.
- La necesidad de una solución escalable que pudieran adaptar los diseñadores, no sólo los desarrolladores.
El equipo necesitaba una plataforma que agilizara el proceso de desarrollo y permitiera a todos los miembros del equipo contribuir a la creación de su producto.
La solución: Aprovechar las herramientas de IA de Dapta
Gracias a Dapta, pudieron crear rápidamente un prototipo y lanzar su solución basada en IA. Con una interfaz clara e intuitiva, Dapta permitió al equipo de Tala -independientemente de sus conocimientos técnicos- crear y probar su producto con eficacia. Las principales ventajas fueron:
- Desarrollo rápido de MVP: La primera versión de Tala se lanzó en semanas utilizando las herramientas de arrastrar y soltar de Dapta.
- Aprendizaje basado en el comportamiento: Los recordatorios de IA se adaptaban a los hábitos de los usuarios, prediciendo sus necesidades antes de que las pidieran.
- Capacitación del equipo: Incluso los miembros no técnicos del equipo podían personalizar e iterar sobre el agente de IA, asegurándose de que el producto evolucionaba con los comentarios de los usuarios.
Los resultados: Lanzamiento más rápido, compromiso más inteligente
Con Dapta, Thalla lo consiguió:
- Tiempo de comercialización más rápido: Los recordatorios basados en IA se pusieron en marcha en un tiempo récord.
- Adopción del usuario sin fisuras: Los nudges predictivos mejoraron la formación de hábitos y la finalización de tareas.
- Crecimiento escalable: El equipo podía perfeccionar continuamente el sistema sin necesidad de grandes conocimientos técnicos.
Aprovechando Dapta, Thalla convirtió una idea ambiciosa en un producto funcional y escalable en cuestión de semanas.